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En los últimos años se han producido algunos cambios importantes alrededor de la regulación del uso de energías verdes en nuestros hogares, concretamente en todo lo que tiene que ver con la que recibimos del sol, que es una de las grandes alternativas que tenemos los usuarios para desconectarnos de la red eléctrica convencional para pasar a un modelo estrictamente de autoconsumo. Pero, ¿qué ventajas y desventajas tiene utilizar la energía solar en nuestras casas?
Ahora mismo esa energía solar ya representa el 5% de todas las renovables que se producen en nuestro país y su futuro pasa, casi obligatoriamente, por su uso de forma generalizada en el ámbito particular, en todos aquellos hogares donde sea posible la instalación de este tipo de paneles que permiten convertir los potentes rayos del sol en energía para calentar el agua, cargar un teléfono móvil, ver la televisión, cocinar o encender la calefacción en invierno.
¿Qué tipos de energía solar existen?
Antes de nada hay que tener en cuenta que, en el momento que hablamos de energía solar, englobamos en realidad a tres tipos diferentes que, esencialmente, se diferencian por la forma de generar electricidad a partir de los principios físicos y técnicos que aplican para obtenerla. En todos los casos el resultado es la consecución de una energía limpia que podemos consumir en nuestros hogares de una forma rápida y barata. Vamos a conocer cuáles son:
Energía solar fototérmica
Este tipo de energía solar funciona a través del mismo principio que opera en el llamado "efecto invernadero", y consiste en que los rayos de luz son absorbidos y transformados posteriormente en energía térmica que podemos utilizar para la calefacción de nuestras casas, por ejemplo. Para conseguirla es necesario instalar una serie de paneles térmicos que, de forma común, se orientan hacia el sur.
Energía solar fotovoltaica
La segunda de estas tecnologías que son capaces de obtener electricidad de los rayos del sol es la fotovoltaica, que se encarga de transformar los rayos del sol en electricidad a través de unas células especiales instaladas también en unos paneles solares que, posteriormente, podemos transferir a nuestra vivienda de la manera que deseemos. Llegado el caso, no solo sirve para nuestro autoconsumo, sino que también podemos almacenarla y llegar a vender el excedente. Este es el tipo más común que se está utilizando para la mayoría de hogares.
Energía solar termoeléctrica
La tercera y última de las formas que tenemos de obtener energía a partir de los rayos del sol es a través de un principio tan viejo como es el del uso del vapor. El calor que reciben los paneles calienta un fluido, normalmente agua, que se evapora y permite iniciar el movimiento en una turbina que comienza a girar. De esta forma, la fuerza térmica se convierte en cinética y, por tanto, es posible conseguir electricidad.
Ventajas de los paneles solares en el hogar
Es evidente que este tipo de energías no son solo beneficiosas para el medio ambiente y evitan la expulsión a la atmósfera de millones de toneladas de CO2 cada año, sino que tienen una aplicación concreta en el ámbito de nuestros hogares. Es por eso que la instalación de este tipo de paneles, y la electricidad que obtenemos de ellos, conlleva una serie de ventajas que tienen que ver con:
- Nos permite desconectarnos de la red eléctrica y pasar a ser completamente autosuficientes
- Fácil instalación de los paneles necesarios en tejados y azoteas, tanto para casas unifamiliares como en aquellos edificios con varias plantas
- Las instalaciones solares revalorizan el precio de una vivienda porque su uso supone un evidente ahorro respecto de otras alternativas menos ecológicas y que dependen del servicio de terceros
- Se trata de una energía verde, limpia, renovable y que no emite gases de efecto invernadero a la atmósfera
- Los paneles solares ofrecen una vida útil de cerca de 20 años aunque, en algunos casos, llegan a los 40
- Las placas solares y demás componentes ofrecen un mantenimiento sencillo y barato
- Se trata de una inversión (económica) que se termina recuperando al cabo de unos diez años
- El funcionamiento de estos sistemas es absolutamente silencioso, por lo que podemos instalarlos en cualquier parte de la casa sin miedo a niveles altos de ruido
- España es, por su situación geográfica, uno de los mejores enclaves para apostar por ella gracias a la cantidad de horas de sol que disfrutamos durante todo el año
- En el caso de contar con un dispositivo para almacenar la energía sobrante, podemos dedicarla al autoconsumo e, incluso, vender el excedente para obtener un rendimiento económico de la instalación
Desventajas de los paneles solares en el hogar
De todas formas, aunque la energía solar tiene, sobre el papel, todo tipo de virtudes, también es cierto que ofrece otra cara que tiene que ver, sobre todo, con el desembolso inicial que deben hacer los usuarios para acceder a ella. De ahí que durante los primeros diez años, todo el rendimiento y ahorro que obtenemos por la energía que somos capaces de crear, se pierda en el pago de la instalación que tenemos en casa. Dejando de lado lo anterior, que es importante, otros inconvenientes de esta energía solar son:
- Las condiciones climáticas condicionan la cantidad de electricidad que podemos obtener día a día. La energía solar no garantiza siempre un mismo ritmo de producción por lo que ésta va a variar dependiendo de la meteorología
- Los paneles solares, en la mayor parte de ocasiones, pierden rendimiento a la hora de generar energía a partir de los primeros diez años, aunque sus niveles se mantienen dentro de lo aceptable para seguir generando energía de forma eficiente
- La instalación de estos paneles, para obtener el mejor rendimiento, debe llevarse a cabo en lugares donde predomine un clima soleado, por lo que en aquellas zonas especialmente propensas a tener niebla o abundantes nubes y lluvias podría no ser la mejor opción
