En invierno una de nuestras mayores preocupaciones es el funcionamiento de la caldera. Antes de que llegue el frío es necesario comprobar que todo funciona correctamente y así evitarnos sobresaltos. Además del buen funcionamiento debemos comprobar que no gotea. A continuación, te contamos las posibles causas y las soluciones a este problema.
¿Por qué gotea la caldera?
Uno de los problemas más frecuentes que nos encontramos es que gotee la caldera, de forma intermitente pero continua, vemos como pierde agua y afecta directamente al buen funcionamiento de esta. Esta pérdida de agua puede deberse a varios factores, lo cuales vamos a explicar.
La mayoría de las veces esta pérdida se produce a través de la válvula se seguridad, esta es la encargada de distribuir la presión de la caldera. Algo que podemos comprobar echando un vistazo al manómetro. Para que esta sea correcta la aguja debe encontrarse entre 1 y 1,5 Kg/cm2. Si la presión no es la correcta veremos como la válvula de seguridad comienza a soltar agua. Ese es uno de los indicativos que algo no está bien, por lo que debemos ponernos manos a la obra para solucionarlo.
La presión es más baja de lo recomendado
Cuando la aguja marca por debajo de 1 kg/cm2 significa que no hay suficiente presión en el circuito y que el agua caliente no llegará a todos los radiadores. Para aumentar la presión debemos hacer uso de una llave, generalmente de color negro con el que añadiremos la presión necesaria. Una vez alcanzada la presión correcta cerraremos esta llave, puesto que dejarla abierta supondrá un peligro para la instalación ya que la presión seguirá subiendo y estaremos en niveles por encima de la recomendada.
Niveles de presión altos
Si esto sucede, la aguja se situará por encima de los 2 kg/cm2, esto supone que está trabajando a una presión superior a la recomendada y puede provocar además de averías, también poner el peligro la instalación. Esto puede significar que hay aire en el sistema que debemos sacar para recuperar la normalidad. Si al eliminar el aire no baja la presión es hora de llamar a un técnico que revise la instalación
Si a pesar de llevar a cabo las anteriores comprobaciones y comprobar que la presión está en los niveles recomendados, seguimos observando que gotea, debemos seguir buscando. Lo siguiente es revisar la llave de llenado y la válvula de seguridad. En el caso de la llave de llenado, puede que esta no esté bien cerrada o incluyo se este dañada. Lo que permitirá la fuga de constante de agua.
Problemas con las cañerías
Además de esto, no debemos descartar la opción de que alguna cañería del sistema esté picada y tenga alguna fuga, en tal caso tras localizar el origen del problema debemos ponernos en contacto con un profesional que nos ayude a resolver el problema.
Estos son algunos de los problemas que podemos detectar a simple vista, si la presión es correcta, no tenemos ninguna llave de paso estropeada y no tenemos fugas, tenemos que poner nuestra atención en el vaso de expansión. Un elemento situado en el interior de la caldera que recuerda a una bombona y que cuya misión es absorber el aumento de la presión del agua en el interior de la caldera. Un elemento muy importante para el buen funcionamiento de la misma y un elemento de seguridad.
Cómo resolver el goteo de la caldera
Dependiendo del origen del problema, tenemos que aplicar distintas soluciones, en el caso de que esta pérdida se produzca con cambios en la presión, en el caso de estar baja debemos aumentar la presión añadiendo agua al circuito, abriendo la llave de llenado, hasta alcanzar los niveles deseados. En el caso de que el goteo sea como consecuencia de la alta presión. Debemos purgar los radiadores, para ello con la calefacción encendida procederemos a purgar uno por uno los radiadores. Utilizamos un recipiente con el que recoger el agua que puede salir al abrir el purgador una vez que hayamos eliminado todo el aire. Cuando hayamos realizado la operación en todos los radiadores, comprobaremos que está en niveles correctos y que ha dejado de gotear.
En el caso en que el problema se encuentre en las llaves de paso, seguridad o vaciado de la caldera, debemos localizar el problema y llamar a un profesional para que sustituya las llaves estropeadas. Del mismo modo que si tenemos una fuga en una cañería, deberá ser un profesional el que sustituya o repare el segmento de cañería dañado. Lo mismo sucede si el goteo es producido por una avería en el vaso expansor.
Para ello será necesario el vaciado del circuito, para lo que después de cerrar la llave de paso abriremos la llave de vaciado del sistema, o en su defecto dejamos salir el agua del circuito a través de los grifos del agua caliente y usaremos las llaves de vaciado de los radiadores.
Para evitar estos problemas es recomendable que antes de empezar las épocas de frío, hagamos una revisión exhaustiva del estado de nuestra caldera y llevar a cabo labores de mantenimiento.
