Aunque son muchas cosas las que tienen en común, hay otras tantas por las que se diferencian tanto el gas butano como el propano. Y a continuación vamos a tratar de explicar cuáles son las similitudes y diferencias entre ambos gases y qué hay que tener en cuenta a hora de decantarnos por el uso de uno u otro.
Diferencias entre gas butano y propano
Ambos gases se obtienen en el fraccionamiento de petróleo y el gas natural, estos dos hidrocarburos tienen en común la forma de extracción y en parte el uso que hacemos de ellos, pero como hemos mencionado anteriormente, las diferencias entre ambos son numerosas y vamos a comenzar por la composición de ambos gases.
La forma de comercialización de estos gases no es pura, ya que antes de esto son sometidos una serie de procesos con los que se pretende la mejora de sus cualidades. El resultado es una mezcla que en el caso del gas butano representa un 60% de butano, 30% de isobutano y un 10 por ciento de propano.
En el caso del propano, contiene una proporción más alta del gas puro, esta alcanza hasta el 80%, el resto lo componen hidrocarburos C4 en los que se encuadra el butano e isobutano. Pero esta no es la única diferencia entre ambos, ya que podemos apreciarlas en varios aspectos. Las principales características a analizar y en las que encontramos notables diferencias son en la densidad, la congelación y la forma de suministro.
En el caso de la densidad cabe destacar que el butano es mucho más denso que el propano. La densidad expresada en Kilos por metro cúbico del gas es de 2,533 mientras que el propano sólo alcanza los 1,882 kg/m3. Con lo que llegamos a la conclusión, en caso de fuga un gas al ser más denso se acumulará en la parte inferior mientras que cuanto menos denso sea su tendencia será ir hacia la parte superior.
Otro de los aspectos en los que podemos apreciar la diferencia es el punto de congelación de ambos gases. Mientras que el butano se congela a -0,5 grados centígrados el propano lo hace a -44 grados centígrados. De ahí que se use el butano en climas templados y el propano en zonas más frías.
También cambia la forma de almacenamiento de ambos, mientras que el butano lo encontramos en dos presentaciones, bombonas de 6 y 12,5 kg. El propano además de en bombonas con un mayor volumen con 11 y 35 kg, también puede almacenarse en depósitos con diferentes capacidades.
Poder calorífico
Otro aspecto y quizás el más importante es el poder calorífico de los gases o la capacidad de estos para producir calor tras la combustión de una unidad de volumen, en condiciones de presión y temperatura. De ahí que tanto el butano, con poder calorífico de 12,73 kwh/Kg y el propano, con una cifra muy similar a la anterior de 12,86 kwh/Kg, podamos decir que ambos gases producen un alto poder calorífico, por lo que son mayoritariamente elegidos tanto para su uso en cocinas como para calentar nuestros hogares.
Precios
El precio del gas propano es superior al de butano, esto se debe principalmente por su punto de congelación. El hecho de tener una temperatura de congelación a 44 grados bajo cero, hace que sea más fácil almacenarlo. Y por ello es elegido para uso industrial y comercial. A pesar de su precio, este gas tiene una gran rentabilidad. En esto influye otro de los aspectos de los que hablamos anteriormente como poder calórico del mismo, el cual lo hace mucho más eficiente, también debemos tener en cuenta que las bombonas de Gas propano son más grandes y pueden albergar una mayor capacidad, ya que en estado líquido en un mismo espacio podremos almacenar propano que butano.
Suministro
Como hemos contado anteriormente, estos gases tienen diferentes formas de suministro, mientras que el gas butano podemos adquirirlo almacenado en bombonas de 6 y 12,5 kg las cuales podemos adquirir en estaciones de servicio, o a través del teléfono o internet en puntos de suministro autorizados. Para acceder al suministro de estas tendremos que suscribir un contrato para tener acceso al suministro y cambio de bombonas.
Del mismo modo sucede con el suministro de propano, en este caso también lo encontramos bien en bombonas de 11 y 35 kg, las cuales podemos acudir a las estaciones de servicio o pedir el suministro a los distribuidores autorizados. En el caso de los tanques de propano, debemos llamar a la empresa suministradora que acuda a nuestro domicilio.
¿Qué es mejor, gas butano o propano?
La respuesta a esta pregunta no es sencilla y puede resultar ambigua, ya que todo depende de nuestras circunstancias y necesidades. Y en nuestro caso incide directamente las cualidades de los gases y el método de suministro.
En los casos en los que es recomendable el uso del butano es en aquellos en los que no tenemos un consumo elevado. Sobre todo, en zonas templadas en las que son fáciles de almacenar y transportar. Son ideales para su uso en caravanas donde nos enfrentamos a espacios reducidos y barbacoas. Además, el tamaño y peso de sus bombonas favorecen el transporte y su manipulado.
En cambio, las bombonas de propano tienen un mayor tamaño y peso, pero son difíciles de manipular y almacenar, sobre todo en uso doméstico. Recomendadas cuando el consumo de gas es medio alto y sobre todo en zonas con temperaturas frías. Ya sea para el uso particular como calefacción o incluso para la cocina o en negocios de restauración, donde debemos optar por bombonas de alta capacidad e incluso por la instalación de depósitos.