Las ciudades del futuro ya son una realidad, aunque no son tal y como se nos presentaban en la literatura o en el cine. Y aunque el concepto de Smart City nace a finales del siglo XX, hoy podemos catalogar algunas ciudades con ese nombre. A continuación, trataremos de explicar qué es una Smart City y veremos algunos ejemplos de ciudades inteligentes y su evolución por todo el mundo.
¿Qué es una Smart City?
Para que podamos considerarlas bajo este precepto, más que una ciudad debemos enfrentarnos a un sistema interconectado y complejo en el que se implementan nuevas tecnologías para ponerlas al servicio de los servicios. Como en el caso de los recursos energéticos, la comunicación, el transporte, la habitabilidad y la seguridad de la ciudadanía entre otros.
Siempre con el objetivo de la máxima eficiencia, reduciendo a su vez su impacto medioambiental, garantizando la seguridad, promoviendo la transparencia de las intuiciones así como el establecimiento de una economía sostenible , hasta encontrar el equilibrio entre sostenibilidad, tecnología, personas e instituciones.
Algo que no debemos de confundir con las ciudades sostenibles, cuyo fin es reducir la huella ecológica en función de sus características culturales, geográficas, económicas y sociales. Promoviendo modalidades de producción y consumo más eficientes así como el uso de las energías renovables.
Principales características de las Smart City
Para que una ciudad pueda considerarse una ciudad 4.0 o Smart City, debe cumplir una serie de requisitos mínimos, los cuales se enmarcan en la vida de los ciudadanos y en la que no deben faltar la mayoría de estos aspectos.
Uno de los aspectos para considerar una ciudad dentro de esta categoría es la videovigilancia urbana. Con la que se verá reducida la criminalidad y reforzada la seguridad. Aunque en este aspecto hay muchos detractores, hemos oído hablar del gran hermano o del ojo que todo lo vigila, por lo que está en contraposición con la privacidad de los individuos.
El sistema de Alertas frente a peligros reales que amenazan la supervivencia de la población. Son aquellos que nos ponen en alerta frente a huracanes, tormentas, incendios e inundaciones. Un sistema que ya se ha impuesto en muchas ciudades.
El control de las emisiones con sistemas de medición de niveles de polución en tiempo real es algo imprescindible para considerar a una Smart City como tal.
La gestión de los residuos es otro de los factores a tener en cuenta, con la implantación de sistemas de detección de llenado. Con lo que se crea la alerta para su vaciado. El transporte público y su geolocalización es un punto a tener en cuenta. En tiempo real podremos determinar la afluencia y los horarios.
Un problema habitual en las ciudades es la del estacionamiento, la implantación de sistemas que nos permitan conocer en tiempo real la ocupación de los parkings y de puntos de alquiler de vehículos sostenibles.
Los sistemas de tráfico en tiempo real, con los que los conductores podrán tomar la mejor decisión y circular por las zonas menos tensionadas de la ciudad, evitando la formación de atascos y mejorando la circulación.
Beneficios de las Smart City para los ciudadanos y el planeta
El análisis de los datos nos permite tomar mejores decisiones, de manera que gracias a estas se produce una mejora en la eficiencia de las ciudades y el medio ambiente. Una mayor colaboración de la ciudadanía con el proyecto, con lo que obtenemos ciudades más seguras. Estas son en resumen las ventajas a grandes rasgos de este tipo de ciudades.
Ejemplos de ciudades inteligentes en el mundo
Cada año son más las ciudades en pueden considerarse como Smart City, y están lideradas por grandes urbes del todo el mundo en las que caben destacar las siguientes
Nueva York
La gran manzana se ha sometido a una gran transformación. Ha apostado por proyectos promovidos tanto por el sector privado como por el público. Cuyo objetivo es aumentar la eficacia reduciendo los costes. En su caso destaca su trabajo en la tecnología que aprovecha el internet de las cosas.
Londres
En el caso de la primera gran ciudad europea su apuesta abarca varios sectores, entre los que se encuentra la ecología, con edificios ecológicos y zonas verdes. Las telecomunicaciones, implementando puntos de Wifi gratuitos y el transporte, con el uso de vehículos sin conductor.
Singapur
Desde hace una década trabajan en este aspecto, su proyecto consiste en la monitorización de la ciudad por medio de sensores que recogen la actividad de sus ciudadanos. Con la cual pueden llevar a cabo las estrategias de mejora
Barcelona
En el ámbito nacional destaca la ciudad de Barcelona. En la que se han desarrollado una serie de apps, con las que involucrar a la ciudadanía. Su próximo proyecto consiste en suministrar Wifi gratuito.
