La escalada de los precios de la energía es algo que preocupa a un inmenso número de ciudadanos. Términos como tramo, subasta o derechos de emisión de CO2 con algunos que escuchamos frecuentemente. Todos estos son factores que afectan directamente al precio de la luz y que no está de más conocer qué significan. Si no sabes que son los derechos de emisión, a continuación trataremos de explicarlo de la forma más sencilla.
¿Qué son los derechos de emisión de CO2?
Dicho así de forma simple, se trata de algo así como un permiso para contaminar. Una de las consecuencias directas de la transformación de la energía es la emisión a la atmósfera de CO2, este gas indoloro e incoloro compuesto por carbono y oxígeno, es el principal causante del calentamiento global. Por lo que debemos controlar las emisiones si queremos preservar el planeta o al menos retrasar su empeoramiento. Para ello la Unión Europea asigna a cada país una producción máxima de este gas. Estos a su vez asignan a las grandes empresas un porcentaje de forma gratuita y directa a través de subastas públicas.
En los ultimo años hemos visto como la unión europea ha reducido la cantidad de emisiones permitidas, algo que está haciendo que la compra de estos derechos se encarezca. Esto se unido a que la asignación gratuita de los derechos se ha limitado a aquellos sectores que se ven sometidos más por las exigencias de las restricciones.
¿Cuánto vale un derecho de emisión de CO2 en España?
Antes de entrar a analizar el precio, debemos saber que el comercio de emisiones es uno de los mecanismos contemplados en el protocolo de Kioto para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero a la atmósfera. A través de este se creó el comercio de emisiones con el fin de reducir estas, y permiten vender los créditos de emisiones excedentarios a otros países. De forma que los países y/o personas jurídicas autorizadas pueden intercambiar distintos tipos de unidades contables y obtener un doble beneficio, reduciendo la emisión de gases siendo recompensable por ello y por otro lado todo el beneficio económico de la venta.
El precio ha ido cambiando a lo largo de los años, sufriendo un incremento muy elevado recientemente. Lo que ha generado una escala también el los precios de la electricidad. Es un factor variable que se ha ido progresivamente encareciendo, teniendo en cuenta de que el precio por tonelada hace cuatro años era de 4 euros. En 2021 el precio de la tonelada alcanzo los sesenta euros, situándose este año de media en los 78,16 euros por tonelada. Un incremento muy por encima de lo que venía siendo normal hasta ahora. Y todo apunta a que este seguirá subiendo, ya que cada año el número de emisiones se reduce.
Decir que el precio de las emisiones de CO2 ha tocado techo no es algo asumible en este momento, por lo que debemos estar atentos a sus subidas, ya que estas repercuten de forma negativa en el precio de la luz.
Por otro lado, a las instituciones les favorece un precio alto de estos derechos, ya que estos fueron creados para desincentivar el uso de energías sucias en favor de las limpias, penalizando la generación de residuos y la emisión de CO2
¿A dónde van a parar estos ingresos?
Como ya hemos comentado, la unión Europea otorga a cada país una cantidad de emisiones máxima que lanzar a la atmósfera. Los estados reparten como creen conveniente la emisión de las mismas, a través de dos mecanismos, la asignación de forma gratuita a los sectores más afectados por estás medidas. Y por otro lado en subasta pública, en estas se ha llegado incluso a subastar hasta el 60% de las emisiones totales. Las ganancias obtenidas por estas subastas son obtenidas por el estado.
Pero estos títulos a su vez pueden comprarse y venderse. Con esto lo que se pretende es la desincentivación del uso de energías sucias por parte de los gobiernos. Por lo que los beneficiarios de este comercio son aquellos poseedores que venden sus derechos. En la actualidad existen varios mercados de semisiones. Aunque la comisión europea puso en marcha una en 2005 el mercado de CO2, en el cual participan 27 miembros. Con el fin de regular las actividades en el sector. Todo esto como hemos contado está regulado por el protocolo de Kioto que está en vigor desde febrero de 2005, un acuerdo internacional que surgió de la Convención Marco de las Naciones Unidas sorbe el cambio climático.