¿Cuánto consume una secadora de ropa en tu casa?

Prácticamente todos los hogares de nuestro país cuentan con una serie de electrodomésticos que son comunes: una nevera, una lavadora, el lavavajillas, el microondas y, ya apurando mucho, algún robot de cocina, un congelador de arcón extra y una segunda nevera para los refrescos y bebidas. En ese listado lo mismo algunos echan en falta la presencia de una secadora de ropa, función que ya suelen incluir muchas lavadoras y que en los últimos tiempos ha visto disparado su consumo. Es por eso que lo mismo, por tratarse de una reciente novedad, no sepas ubicar en qué rango de consumo se sitúa. ¿Es mucho, es poco? ¿Nos va a salir muy cara? ¿Cuánto consume una de estas secadoras en casa?

Estas secadoras de ropa no son un producto que en España se demande en exceso, pero por culpa de la aplicación de ordenanzas municipales (sobre todo) cada vez más severas, se ha convertido en una misión imposible tender la ropa en ventanas y terrazas, por lo que tenemos que buscar una alternativa. Y como las nuevas construcciones tampoco tienen esos legendario patios internos, pues toca hacerlo dentro de casa. Y es ahí donde la eficiencia de estas secadoras entra de lleno en escena.

¿Cuántos tipos de secadoras existen?

Antes de saber cuánto nos costará mantener uno de estos electrodomésticos debes tener en duenta que existen de distintos tipos. Seguramente tú quieras una normalita, no muy cara y conectada a la red eléctrica, por lo que si vas a la tienda ahora mismo a comprar una podrías encontrarte con la sorpresa de que existen algunos modelos de los que es mejor huir. Por ejemplo las secadoras de gas, que son muy económicas pero nos obligan a contar con una instalación específica que alimente el aparato desde la toma principal de gas natural. Hoy en día se trata de un tipo que está en claro retroceso y desuso, por lo que vamos a fijarnos en todas las demás.

A continuación os detallamos los tipos de secadoras que tienes a tu disposición en el mercado:

Secadoras de evacuación

Se trata de modelos que expulsan el agua de la ropa a través de un tubo externo tras calentar el aire que penetra en el tambor gracias al uso de resistencias eléctricas. Son capaces de alcanzar los 8 kilos de carga y suelen necesitar de dos ciclos de secado cada vez que las utilizamos. Eso, como podrás imaginar, dispara su consumo.

Ese funcionamiento obliga a que este tipo de secadoras tengan que utilizarse en casas grandes, casi siempre en el exterior, para facilitar la evacuación del agua que acaba saliendo por los conductos. Son, sin duda, las que más consumen.

Secadoras de condensación

Estos modelos utilizan un principio técnico prácticamente calcado al de las secadoras de evacuación ya que calientan el aire con resistencias eléctricas pero, en vez de evacuar el agua a través de un tubo, se condensa dentro de un compartimento especial.

Aun así, este tipo de secadoras también provocan un alto índice de consumo eléctrico por ciclo de lavado, donde son capaces de manejar hasta 8 kilos de carga de ropa.

Secadoras con bomba de calor

Son, de los tres tipos, la que menos energía consume ya que calientan el aire gracias a un motor eléctrico que lo introduce en el tambor y, posteriormente, lo recicla para aprovechar el gasto ya realizado. Eso permite al electrodomésticos ser tremendamente eficiente y reducir ese gasto energético prácticamente a la mitad (respecto de los modelos de evacuación y condensación).

Como en el caso de los anteriores tipos de secadoras, las que tienen bomba de calor también cuentan con una capacidad de 8 kilos de carga de ropa y son, ahora mismo, los modelos que tienden a imponerse en el mercado. Son, desgraciadamente, las más modernas y por lo tanto, más caras, pero no tienen rival cuando hacemos el cálculo de precio-consumo.

¿Cuánto consume una secadora de ropa?

Visto lo anterior, es evidente que la primera decisión quevamos a tomar tiene que ver con el tipo de secadora de ropa que vamos a comprar y el gasto extra que supone en cada caso. Eso nos debe llevar a realizar un cálculo rápido que tiene como protagonistas las siguientes variables:

• ¿Cuánto consume la secadora que tenemos?
• ¿Cuántos ciclos de secado vamos a realizar a la semana?
• ¿Qué precio tiene el kWh. que pagamos?
• ¿Es posible ahorrar un poquito más realizando esos ciclos de secado en los horarios más baratos de nuestra tarifa eléctrica?

Hay que tener en cuenta que el consumo medio de una secadora de ropa se puede fijar como promedio en unos 270W, y si a eso le unimos la duración de cada ciclo (entre 60 y 120 minutos dependiendo del tipo de prenda que vamos a secar), es posible calcular cuánto vamos a gastar en su uso. A continuación te dejamos una pequeña tabla con el gasto que supone una secadora (por tipo).

¿Importa la clasificación energética?

Otro de los detalles que determinan el mayor o menor consumo es la clasificación energética del electrodoméstico. No es lo mismo decantarnos por un modelo A, que hacerlo por otro D, E o F ya que a medida que descienden en la escala, mayor es su consumo. Eso nos lleva a un dilema evidente: ¿la diferencia de precios en las tiendas justifica un mayor desembolso¿ ¿Comprar el modelo más caro se traduce automáticamente en un ahorro en la factura de la luz?

Como antes os señalábamos, es crucial conocer el uso que le vamos a dar a la secadora, cuál será su carga en cada ciclo y por qué tipo de tecnología nos hemos decantado. Todas esas variables, bien analizadas, pueden ofrecernos una estimación fiable del consumo eléctrico que podemos esperar.

Trucos para ahorrar en el uso de la secadora

Si con todo lo anterior, hechas las cuentas, os habéis decidido por un tipo concreto de secadora y un modelo con eficiencia energética buena, del tipo A o B, todavía tenéis margen de ahorro para disminuir el montante de la factura de la luz. ¿Cómo? Mirad:

• No mezclar tejidos que tengan diferentes tiempos de secado: no solo afecta al consumo (la secadora trabaja mucho más), sino que podemos dañar las prendas.
• Usar la secadora solo cuando sea ESTRICTAMENTE necesario.
• Aprovechar el buen tiempo del verano para secar la ropa en el exterior, si contáis con lugares donde esté permitido hacerlo.
• Establece horquillas claras con grados de secado y si terminas el programa antes de que concluya, podrás añadir un ahorro extra de hasta un 20%.
• Limpiar periódicamente la secadora para quitar restos de ropa que se van depositando en el tambor con el paso del tiempo.