Una de las asignaturas pendientes para muchos usuarios es llegar a tener un hogar eficiente energéticamente. El campo de la climatización se está adaptando a los nuevos tiempos y tiene como objetivo consumir menos energía y con la máxima eficacia. Este es el caso de los calentadores de agua, donde por ahora este grado de eficiencia sólo es alcanzada por los calentadores eléctricos instantáneos. A continuación, te contamos cómo funciona, en qué consiste y todo lo que debes saber sobre ellos.
Explorando el calentador de agua eléctrico Instantáneo
Durante décadas los calentadores de agua han producido el agua caliente en millones de hogares, ya sean de gas butano, propano o eléctricos en forma de termos. Ahora además podemos optar por instalar un calentador eléctrico instantáneo.
A diferencia de los termos, estos no acumulan el agua, sino que produce de forma ilimitada agua caliente a medida que la vamos necesitando. Para calentar el agua no es necesario el uso del gas, es la electricidad la encargada de aumentar la temperatura del agua.
Beneficios y Características Clave
Son muchas las ventajas de aportar por su uso. Son fáciles de instalar, y solo hay que conectarlos a la luz y al circuito del agua corriente. Su precio comparado con otros sistemas es bastante asequible por lo que puede ser a corto y medio plazo una muy buena inversión.
Dependiendo de nuestras necesidades podemos optar por diferentes modelos. Los más pequeños nos permiten hacer uso tanto en un solo grifo o por modelos superiores que permite su uso en varios grifos.
Los calentadores eléctricos instantáneos son mucho más pequeños y ocupan un menor espacio. Son altamente eficientes y además de esto ahorran bastante en la factura de la luz, ya que el gasto se produce sólo en el momento en que hacemos uso del agua caliente, que el agua se produce a demanda. Algo que no pasa con los termos eléctricos, que necesitan mantener la temperatura del agua almacenada.
Además, su instalación no necesita mantenimiento, como en el caso de los calentadores de gas que están sujetos a la inspección técnica.
Comparativa: calentador instantáneo vs. tradicional
Dicen que las comparaciones nunca son buenas, aunque en algunos casos son necesarias sobre todo cuando se trata de ahorrar y ser lo más eficientes posible. A la hora de decidir entre un calentador o un termo y un calentador eléctrico lo mejor es fijarnos en sus diferencias.
Comenzaremos por el modo de funcionamiento, como hemos mencionado en el caso del termo eléctrico el agua se calienta con la ayuda de la resistencia que hay en el interior de tanque. El volumen de agua caliente está limitado por el tamaño del depósito. Por lo que cuando esta se agota, debemos esperar a que se llene y caliente de nuevo para seguir disfrutando de agua caliente.
En el caso del calentador eléctrico, como ya hemos comentado, esto no sucede, la corriente de agua caliente es ilimitada y se calienta en función que la necesitemos.
En términos de tamaño de instalación, en el caso de los calentadores eléctricos necesitamos un menor espacio. En el caso de los termos, dependiendo del tamaño del tanque, necesitaremos más o menos espacio. Pero no solo debemos contar con espacio, sino que para su instalación debemos disponer de paredes de obra resistentes para aguantar su peso.
A este respecto, también debemos tener en cuenta la distancia de instalación con respecto al lugar donde prestarán servicio. Los termos eléctricos tienen esto a su favor ya que aceptan distancias mayores sin alterar la temperatura del agua. Mientras que, en el caso de los calentadores, estos no pueden situarse a más de 8 metros de separación. En tal caso el agua no llegará con suficiente temperatura.
La capacidad es otro de los aspectos a valorar a la hora de elegir, en el caso de los calentadores instantáneos, no están recomendados para grandes caudales y son muy sensibles a la presión. Por lo que son ideales para espacios con baja demanda y cortos espacios de tiempo. Mientras que los termos independientemente de su capacidad son capaces de abastecer a una mayor demanda.
Ahora que el precio de la luz es una de las principales preocupaciones de los usuarios, un bajo consumo es la clave para la eficiencia. Si hablamos en términos de potencia, los calentadores de agua instantánea a pesar de no necesitar precalentar el agua, y que solo gasta cuando se hace uso, necesita una potencia elevada, con un promedio de 8 KW. Lo que supone que a la hora de su uso debemos necesitamos cables más gruesos y en algunos casos de una instalación trifásica, que no es común en todas las viviendas. En el caso de los termos eléctricos, solo es necesario una toma de corriente estándar para instalarlos, además muchos de estos disponen además de termostato de programador.
En términos de mantenimiento, mientras que los termos eléctricos están más tiempo funcionando por lo que sus piezas se desgastan más rápidamente. En el caso de los calentadores eléctricos instantáneos son más vulnerables a la erosión interior y a la acumulación de minerales, por lo que su gran enemigo son las aguas duras.
Visto esto es difícil tomar una decisión y debemos estudiar en profundidad nuestras necesidades para ver cuál de los dos sistemas se adaptan mejor a nuestras necesidades.